Reseña de Z, el terror viene de tu mente.
El terror es el género favorito de muchos, nos gusta espantarnos, mantenernos al borde del asiento esperando ser sorprendidos por algún ser fuera de nuestra realidad… o incluso dentro de nuestra propia mente.
Muchas son las propuestas que salieron este año para sacarnos un buen grito, pero llega a cartelera una nueva historia llamada Z, que muestra esa delgada línea entre la imaginación de la infancia y lo poderosa que puede ser en la vida adulta.
Beth es esposa y madre de una familia completamente normal, sin embargo, por la situación médica de su madre se siente atrapada sin poder hacer más en su vida, su hermana no es de mucha ayuda para los cuidados y su esposo puede que guarde más de un secreto.
En uno de esos días rutinarios para ella, Josh, su hijo llega a la casa con un nuevo amigo, sin embargo, éste es imaginario y comienzan a convivir, jugar y lo que podría parecer un momento más de la niñez hasta que comienzan a complicarse las cosas personal y escolarmente.
Después de convivir algunos días con este nuevo amigo “imaginario» llamado Z, se mete en problemas al grado de que tendrán que recurrir a un psicólogo para corroborar que su hijo no esté desarrollando problemas de conducta que pudieran afectarlo más de lo que ya lo ha hecho.
Esta nueva película tiene una buena idea pero mal estructurada y con muchas faltas de desarrollo, empezando porque no llegamos a concluir si se trata de realmente un amigo “imaginario”, un demonio o incluso hasta un trastorno mental no tratado correctamente, pues aunque vemos la presencia de un psicólogo, éste no juega mucho papel en la trama pasando a ser un personaje plano que ayuda a “justificar ciertas ideas”.
Aunque no es la primera película del director, pues ya había trabajado anteriormente en la cinta llamada Still/Born (2017), se nota mucho la influencia de películas como Babadook (2014) por los dibujos encontrados en las paredes y como éstos afectan la percepción de los padres o involucrados, e incluso vemos algunos guiños de Insidious (2010) por la casa, el “don” posiblemente heredado, el padre ausente por trabajo, entre otras cosas. Aún teniendo como base éstas grandes películas no logra su cometido.
Los efectos de la cinta son muy pocos, por no decir nulos, lo poco que vemos de Z podría parecernos algo inspirado en la escultura viral llamada Momo, la cual era escalofriante en su momento, no esperen de esta película una llena de jump scares, al contrario, le harían bien tener uno que otro.
Jett Klyne es quien interpreta a Josh, este niño normal que debido a un amigo imaginario deteriora su vida social, académica y hasta familiar, la actuación del niño está bien e incluso desaprovechada, lo hemos visto más en películas independientes como 13 steps (2016) o The boy (2016), aunque no se limita a eso, pues ha participado en seres como The chilling adventures of Sabrina (2018-) e incluso en Supergirl (2015-).
Keegan Connor Tracy es Beth y es increíble verla en esta película, ver como se deteriora, como el cansancio, la salud mental, y resto de factores externos pueden llevarte a una caída en seco sin que nadie te detenga. El maquillaje que tiene desde ser madre hasta temer por su propia vida, se aplaude. La hemos visto anteriormente en series como Once upon a time (2011-2018).
Para ser una película de terror llega un poco tarde a la época spooky que todos esperamos y pasará a ser una más de propuestas que quedarán en el olvido. No destaca por si sola y una segunda parte no se vería nada prometedora, la fórmula la tienen, la idea también, pero el director tendrá que encontrar algo mejor que resaltar para sus futuros proyectos si no quiere pasar al olvido.
Ficha técnica:
- Titulo original: Z
- Director: Brandon Chistensen
- Año: 2019
- Elenco: Keegan Connor Tracy, Sean Rogerson, Sara Canning.
- ¿Dónde se puede ver?: cartelera local a partir del 26/11/2020
- CALIFICACIÓN: 5/10
Al leer los primeros parrafos me sonó mucho a The Babadook, luego bajo y ahí esta la referencia jajaja.
En efecto suena a una idea incompleta o, cuando menos, mal ejecutada.