Carmen Sandiego (Reseña)
Recientemente, Netflix lanzó la cuarta y tristemente última temporada de Carmen Sandiego, que es un retelling de una serie de los 90’s que, a su vez, fue inspirada en el videojuego de 1985 llamado Where in the World is Carmen Sandiego. Ambos proyectos tenían como fin ser un medio educativo a través del cual los niños aprendieran datos curiosos o característicos de diferentes países mientras seguían la historia de una misteriosa ladrona que daba el nombre al show animado.
La esencia educativa no se perdió del todo en esta nueva propuesta de la plataforma de streaming, ya que a través de los capítulos se siguen dando datos del país en cuestión; lo nuevo es que mientras en la historia original Carmen Sandiego era una villana, aquí pasa a ser la heroína. Para lograr esto fue necesario darle un trasfondo al personaje, que era algo que no tenían las versiones anteriores, ya que siempre la vida y origen de Carmen había sido un misterio para los fanáticos; por lo que ahora optaron por ir dejando pistas sobre el pasado de la protagonista, la cual fue criada por V.I.L.E (Villains International League of Evil), que es una organización dedicada a realizar grandes atracos y a su vez, reclutar y entrenar a toda una generación de ladrones.
En principio, Carmen Sandiego formó parte de dicha organización, siendo una de las alumnas más destacadas; pero en un punto de quiebre se da cuenta que lo que hace está mal, por lo que decide dedicar su vida a frustrar los planes de V.I.L.E. En el camino a su redención se encuentra con Player, un niño que sólo conoce a través de redes y que, al contarle un poco de su historia, decide ayudarla en su misión, convirtiéndose así, en el clásico chico de la silla que siempre apoya al héroe en cuestiones de logística y tecnología.
Posteriormente, Sandiego conoce a Ivy y Zack, dos chicos apasionados por las carreras de autos, que de igual forma se ven interesados en ayudar a la protagonista, siendo los que se encargarán de cubrirle la espalda en sus aventuras a través del mundo. El camino para cumplir su misión no será fácil, debido a que la protagonista se verá involucrada en un doble juego del gato y el ratón; por un lado, tendrá que pelear contra V.I.L.E., lo que en consecuencia la involucrará en escenas del crimen, y a su vez, provocará que A.C.M.E (Agency to Classify and Monitor Evildoers) fije su atención en ella, creyéndola culpable de todos los atracos cometidos por la liga de villanos que la formó. A pesar de que el fin de la protagonista y de la organización anteriormente mencionada es acabar con los villanos, Carmen cree que es mejor trabajar por su cuenta, por lo que se verá obligada a huir de los agentes Chase Devineaux y Julia Argent, que son los encargados de su caso.
Sin duda Carmen Sandiego es una de las mejores propuestas que ha hecho Netflix recientemente en cuestión de series animadas. Su estética es muy buena, porque a través de la gama de colores utilizada, crean un ambiente de misterio, esto acompañado de las escenas de acción en las que la animación es bastante fluida, tiene como resultado algo muy dinámico.
Todo esto acompañado de los actores de doblaje entre los que se encuentran figuras como Gina Rodríguez, conocida por su papel en Jane the Virgin o Finn Wolfhard de Stranger Things, hacen que en conjunto sea un producto muy completo.
Claro que la serie tiene pequeñas flaquezas y esto a veces se refleja en la construcción de los personajes, ya que algunos se sienten un poco planos o que fueron puestos para simplemente ser el alivio cómico, como es el caso de los agentes de A.C.M.E. y los propios compañeros de la protagonista. A pesar de ello, parece ser que para esta última temporada escucharon las críticas y aprendieron de sus errores, ‘nerfeando’ un poco a la protagonista, ya que muchos decían que era la típica “Mary Sue”, apodo dado a los personajes que son tan perfectos que no terminas de creértelo; y es que a Carmen todo le salía bien, realmente pocas veces te puedes llegar a preocupar por ella.
Es así que en esta cuarta temporada optaron por darle un crecimiento al hacerla un poquito más vulnerable, mostrándonos una faceta en la que ella puede perder, por lo que se verá obligada a delegar ciertas acciones que en consecuencia le otorga mayor protagonismo a los personajes secundarios y permite explorar más en la personalidad de éstos, logrando así, un cierre que si bien se sintió algo apresurado, consigue que los fanáticos se queden satisfechos.