‘True North’: a-ha en un viaje cinematográfico a sus raíces
Morten Harket, Magne Furuholmen y Paul Waaktaar-Savoy componen a-ha, un grupo musical que marcó a varias generaciones con el mega hit Take On Me. Sin embargo y contrario a lo que se podría esperar, la banda ha continuado una carrera notable, apostando por álbumes y proyectos que dejan atónitos tanto a fans como público que solo los reconoce por su más grande éxito.
El álbum de estudio número 13, que supone también la celebración por el 40 aniversario de su formación, llega para la agrupación noruega con un doble proyecto ambicioso: un largometraje y la placa musical, ambas complementarios el uno con el otro, que busca causar impacto en el oyente con un mensaje ambiental que le anime a las nuevas generaciones a esforzarse por cambia rla situación climática.
En la dirección de esta experiencia audiovisual está a cargo el cineasta Stian Andersen, quien recibió comentarios positivos con el documental Backstreet Girls-Tilbake til Muotathal, un ascendente director que demuestra sus capacidades detrás de la cámara al regalar bellas imágenes que hacen que espectadores noruegos puedan conectar con las raíces pescadoras, de los fríos propios del ciruclar polar así como de una mayor conexión por parte del público mundial, quienes pueden sentirse atrapados por postales que crecen en efecto gracias a la música de alta calidad por parte de a-ha.
Combinando historias audiovusuales que ilustran las canciones con una sesión de grabación montada como si de un concierto se tratará, el largometraje también permite que los 3 integrantes cuenten algunos fragmentos de sus historias, de como esas raíces del norte noruego permanecen y como, pese a hacer su vida en otros lares, ese pasado sigue latente en cada momento de sus vidas.
Mucho de lo realizado en el MTV Unplugged de 2017, aquel magnífico recital que quedó en la memoria por sus excelentes versiones acústicas-orquestales (resaltando, como era de esperar, por una versión melancólica pero bellamente realizad de Take On Me), se utiliza de gran manera, con la diferencia de que aquí el uso de instrumentos más eléctricos permite otras posibilidades que son bien aprovechadas.
Es innegable que las nuevas canciones presentadas en este largometraje son de alta calidad, pasando de la dulzura al fenetismo, de la melancolía a la vivencia más feliz con el presente, un cúmulo de emociones que sin duda los paisajes nórdicos elevan.
A la vez, en cada entrevista a los miembros de la banda, sacan a relucir pensamientos que explican la identidad de la misma. Composiciones que poseen una estética sonora bailable pero con letra que golpea duro, en este caso el mensaje se ha volcado a ser un fuerte reproche a lo que se le ha hecho al medio ambiente, a cómo se toma de la naturaleza sin dar nada. Citando de esta cinta: «se usan las canciones para dejar clara una postura».
El próximo 15 de septiembre llegarán a salas mexicanas True North y sin duda, es una gran opción para conectar con aquellos hermosos parajes fríos, así como para darle una oportunidad a una banda que, lamentablemente, ha quedado encapsulada para la mayor parte del globo en una sola canción, pero que continúa con trabajos que valen mucho la pena.