‘Fire To Love’: amor, volcanes y el precio de la pasión desmedida
La ciencia ofrece inagotables temas de los cuales nutrir todo tipo de obras. Desde novelas que hacen de eso que podría ser aburrido en aventuras inolvidables (menciones honórificas a Isaac Asimov y Carl Sagan) hasta cintas que explotan la cabeza de todo tipo de audiencias con cuestionamientos que no dejarán a nadie indiferente, siendo los documentales quizá en donde más se hacen producciones de difusión científica, casi siempre con un enfoque de contemplación gracias a narraciones pausadas con toques de acción.
No obstante, en 2022 aterrizaron una multitud de este tipo de proyectos que dieron al público un refresco a las dinámicas planteadas, destacando Fire To Love como quizá la incursión más atractiva y apasionante de todas. Drama, romance, pasión, acercan a la vida en pareja de los vulcanólogos Katia y Maurice Krafft, quienes viajaron por el mundo para estudiar, filmar y dar otro empuje importante a su rama de conocimiento, mucha reminiscencia a Werner Herzog por su cercanía al peligro en la búsqueda de traer de manera lo más realista posible sus filmes.
Sara Dosa, en lo que representa su cuarta cinta (todas documentales), hace una recopilación de material valioso e interesante a esta dupla que hizo historia en el estudio de los volcanes. No solo arroja varios de los momentos más representativos de sus vidas sino que hace una radiografía cinematográfica sólida a su historia como colegas y esposos. Cada aparición en conjunto o en solitario frente a la cámara permite que el espectador los conozca, entienda su amor hacía esas poderosas fuerzas de la naturaleza, pero sobre todo, de animar a nuevas generaciones a que se acerquen a esta disciplina que aún tiene mucho por descubrir.
El ritmo de este documental es ágil gracias a una combinación de material sacado de sus películas, de los programas de televisión, también de archivos familiares y de otros más que no se habían conocido hasta el lanzamiento de este filme, así como de algunas animaciones que sin duda le dan una estética maravillosa a este proyecto.
Sumado a esto, destaca el gran trabajo de restauración de todo lo que se ve en pantalla, ayudado a una excelente narración por parte de la multifácetica Miranda July (quien recientemente ha escrito y dirigido la cinta Kajillionaire. disponible en Star+) quien dota de un tono de voz cálido, empático y que transmite una especie de cercanía con estos dos personajes. Cada diálogo calza perfectamente con lo mostrado, haciendo de esto una experiencia disfrutable.
Shane Boris, Erin Casper, Jocelyne Chaput y también Dosa han realizado una lectura adecuada de todos los elementos que tuvieron a su disposición para construir un relato que va de pasado a presente con buen timing. También han acertado al mostrar las alocadas y arriesgadas iniciativas de los científicos, siempre desde una óptica llamativa que evoca a esas películas de aventura. Ejemplos de esto se pueden mencionar cuando Maurice navegó en un lago de ácido súlfurico en una lancha de goma o cuando Katia tomó fotos a la lava a unos pocos metros, regalando postales impresionantes que ayudaron al estudio de los volcanes.
Por si lo anterior no fuera suficiente, la selección musical que incluye artistas como AIR, Ennio Morricone, Nicolas Godin o Troy Herion dan fuerza a esa relación ominpresente que las películas realizadas por este matrimonio tenían con lo meramente cinematográfico. Los amantes al cine podrán apreciar las referencias a los spaghetti western o a esas road movie, que cambian las carreteras por vuelos, navegación en bote o excursiones a pie por volcanes de todo el mundo.
Quizá su único punto negativo puede ser un final inevitable que se anuncia desde el principio. Esto quita un poco de tensión para quienes no conozcan la historia real, dejando un cierre audiovisual bastante triste pero, irónicamente, un homenaje digno que señala la importancia de su labor que desencadenó en la salvación de muchas vidas gracias al visionado de sus filmes.
Fire To Love es sin duda un fuerte candidato para la temporada de premios, donde los volcanes, el amor y la pasión desmedida componen un documental que demuestra que se pueden llevar a nuevas alturas este tipo de cintas, sin apegarse tanto al formato tradicional ni de renunciar por completo a sus elementos.