Saw X (reseña)
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Fue en 2003 que el cineasta James Wan presentó un cortometraje llamado “SAW” con una duración alrededor de 10 minutos. A partir de este fue que se obtuvo luz verde para un largometraje con el mismo nombre. En 2004 llegaría a cines con éxito rotundo que más adelante se convertiría en una de las sagas más rentables del género de terror, gore y thriller. Tan así, que hoy nos ocupa hablar de su décima entrega.
Recordemos que es en la primera película donde nos muestran a un misterioso asesino que elabora trampas y una especie de “juego” macabro en donde casi su totalidad de las víctimas pierden la vida. Este asesino sería apodado con el nombre de jigsaw (rompecabezas en inglés) pues una vez muertas sus victimas él les recortaría la piel en forma de una pieza de rompecabezas; pues a según de él, la persona habría fallecido por estar incompleta y esta incompletitud se debe a la ausencia de la supervivencia. Es al final de la película que se revela que el autor intelectual de todos los asesinatos, es decir el famoso jigsaw, es John Kramer; un hombre con cáncer cerebral avanzado.
Durante las nueve películas previas se van relevando de forma más extensa las víctimas y “socios”, por no decir pupilos, de John Kramer. Sin embargo, la franquicia no es cronológica con respecto al orden de las entregas. En este caso la décima película se sitúa después de los eventos de la primera, pero antes de los acontecimientos de la segunda cinta. Motivo por el cuál la película no demanda al espectador estar tan fresco de toda la saga, basta con la primera.
John Kramer (Tobin Bell), mejor conocido como Jigsaw, tiene cáncer en una etapa avanzada y se entera de un tratamiento alternativo en México; motivo por el cual decide viajar hasta allá con la esperanza de que su sentencia de muerte sea erradicada. Sin embargo, se topará con que todo fue un fraude y buscará darles una ‘lección’, muy a su manera, a los responsables.
La décima entrega explora un pasaje nunca antes visto de la saga. Trayendo de vuelta a Amanda Young (Shawnee Smith) y nuevas trampas que seguro gustaran a los fanáticos del género y desde luego de la franquicia. Además de la ambientación en un lugar totalmente diferente; que a su vez es una oportunidad para nuevos talentos mexicanos de salir en escena como es el caso de los actores: Renata Vaca, Octavio Hinojosa, Joshua Okamoto y Paulette Hernández.
Es de mención que esta película es ligeramente más larga que la mayoría, de la música podemos decir que sigue en línea con respecto a lo visto en la saga y sin duda, cuenta con sorpresas para el espectador. Aunque, es cierto que quizás por momentos se sientan inverosímil varios elementos presentes; cosa que no sería único de esta entrega, pero que no termina de faltar. Creo ahí radicaría el mayor problema. Sin embargo, creo que la película se mantendrá dentro del gusto de los fans.
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