«Aguas Siniestras»: ¿Qué tan bajo puede llegar el cine de terror?
Si el año pasado hubo sorpresas para el cine de terror como “Háblame”, “Pearl” o “Thanksgiving”, para abrir este año la barra parece no tan alta si partimos que abrimos el género con “Aguas siniestras” y te diremos aquí por qué.
Si bien, en los últimos años ha habido grandes pasos en las historias en el cine de terror, no es de nadie un secreto el que hace un par de décadas, a inicios y mediados de los años 2000, la mayoría del cine de terror no eran mas que adaptaciones de cintas asiáticas que en su mayoría no lograba ni siquiera acercarse en calidad al producto original, es más, muchas de esas producciones en aquella época generaban mas reacciones de risa que de miedo en los asistentes a las salas.
Y aunque poco a poco, las producciones de terror han ido evolucionando (de una buena manera debemos decir), todo el universo de cintas de terror del último par de años ha sido algo mas bien, inestable.
Inestable por que aunque la idea de las películas es buena, quizás los jump scares que utilizan no son del agrado de todos, inestables por que a lo mejor la película aunque se siente fresca, ¿realmente se puede ser fresco en el cine de terror?, inestable por que llega una cinta nueva a salas y en lugar de ser una película que llega a convencer a los amantes del género, mas bien divide de sobremanera al público.
En “Aguas siniestras” se nos presenta una historia en la que una familia arrollada por la tragedia decide mudarse a un tranquilo vecindario de los suburbios americanos, sin saber, que la casa que han elegido para iniciar su nueva vida esta repleta de secretos oscuros, además uno de esos secretos puede ser mas que mortal para los miembros de esa familia.
¿Qué se te viene a la mente cuando una película se llama de esta manera “Aguas siniestras” y en la primera escena una niña desaparece misteriosamente en una alberca extraña en el patio trasero de su casa?, creemos que ni tus teorías mas descabelladas podrían dar en el clavo de lo que realmente pasa en esa casa, y eso es problema de un guión pobre que denota que cada vez es mas complicado crear una nueva y sobre todo buena historia que por lo menos tenga lógica y que haga pensar al espectador para generarle aunque sea cosquillas.
No queremos revelar el plot twist (si le podemos llamar en esta ocasión así), pero una vez que armes el rompecabezas mental de lo que está sucediendo, tu reacción, estamos seguros en un 95% será un gran: “meh”.
Si bien el talento actoral (que en su mayoría son unos desconocidos) se ve comprometido con su proyecto, la historia de una piscina con un pasado turbio no deja de ser inverosímil. El lado positivo realmente no justifica todo lo demás que en “Aguas siniestras” no está bien.
Es triste como fanáticos del terror que aquí somos, que el camino que ya se había recorrido en cuanto a originalidad y cintas bien hechas de terror, de vez en cuando se ve afectado por películas tan poca cosa como esta película, por que si bien somos honestos, la idea suena muy loca y extraña, pero quizás, en un remoto caso donde un director con mucho talento haya tomado la batuta de este proyecto, otra historia podría ser.
“Aguas siniestras” es una de esas cintas que quizás te ayude a matar la aburrición, pero de eso a que te deje algo con lo que te vas a quedar pensando, hay un trecho enorme.
Aguas siniestras o como nos gusta llamarle, “no te metas a esa piscina” ya se encuentra en la mayoría de salas del país, y si lo tuyo lo tuyo son las cintas de terror sin el más mínimo sentido de lógica y/o valores de producción, ¡hey! “Aguas siniestras” es para ti.