El Candidato Honesto (Reseña)
Tonatiuh Pérez Prieto fue un joven que pese a ciertas adversidades, logró salir adelante, cuidando a su abuela, protegiendo a sus amigos y haciendo muchas obras en pro de su comunidad en Catemaco, Veracruz; todo esto lo fue llevando hacia la política.
Con todo su entusiasmo, carisma e ideales se abrió puertas en su partido; se casó, logrando tener una familia muy unida con dos hijos, ante la pérdida de su mujer y con una carrera en ascenso decide comprometerse con otra persona y poco a poco se va corrompiendo, ya nada le importa sólo tener un poder en todos los sentidos. Ante un acontecimiento inesperado, se verá obligado a decir las cosas como son, con toda la honestidad posible sin importar si por esto hace sentir mal a las personas más cercanas a él u ofende a ciertos políticos. Tendrá que decidir qué es lo mejor para él, para su vida personal y pública.
Tomando como referencia los filmes “Liar liar”, dirigido en 1997 por Tom Shadyac, protagonizado por Jim Carrey, donde el personaje central un abogado, se ve obligado por un deseo que pide su hijo, a decir sólo la verdad, así como “O candidato honesto” dirigido en el año 2014 por Roberto Santucci, protagonizado por Leandro Hassum.
En esta ocasión Luis Felipe Ybarra realiza una versión mexicana, tropicalizando todo con algunos guiños hacia lo que se vive actualmente en la política (Como aquello de comparar a México con Dinamarca); utiliza cierta simpatía por parte de su protagonista el actor Adrián Uribe. Pero falla en su intento porque se siente caricaturizado todo y no tiene la credibilidad necesaria.
Hace ver todo acartonado, con muchos clichés de cómo son algunos políticos corruptos que no les importa nada, pasar por encima de quien se les ponga en su camino, de tener puestos de alta jerarquía aún sin tener preparación alguna. Y esto también ocurre con el personaje de “Diana” una periodista joven que trata de informar con veracidad, todo lo que hay detrás un político y cómo éste se desenvuelve detrás y delante de las cámaras, qué tanto miente diciendo siempre los mismos discursos. Pero de repente cambia su actitud de un momento a otro de ser más centrada a también caer en la comedia de lo absurdo.
Si bien se trata de hacer una reflexión sobre cómo una persona que inició desde abajo y llegó hasta lo más alto de un estrato social, cómo esto le afecta, cómo se va distanciando de sus seres queridos; lo cierto es que todo se nota forzado, le falta esa sensibilidad por estar más en un torno fársico.
Cuando se quiere dar cierto discurso ante la sociedad o hacia la familia, queda algo insulso, debido a que los personajes de los hijos de Tonatiuh están muy grises y no tienen esa evolución. Quizás se salve el hijo menor por hacer las cosas sin malicia, sólo ha aprendido diferentes mañas de su padre; mediante una lección comprende lo que está bien, lo que no se debe de realizar y afrontar las consecuencias de sus actos.
Como ha sucedido en las últimas campañas electorales con cierto partido político, en esta ocasión el filme “El candidato honesto” cuenta con una melodía que es muy contagiosa interpretada por Mariana Seoane titulada “La cumbia del Tona”.
Se estrena el 8 de agosto.