Edgar Oceransky (Entrevista)

Reconocido con premios de alto renombre como el primer lugar en el Concurso Nacional de Canto de Nuevo y Rock Urbano (1998) o el tercer lugar en el concurso de los 60 años de Acción Nacional (1999), Edgar Oceransky ha cimentado una carrera musical que abarca trova, pop y balada romántica, cosechando éxitos que lo han llevado a colaborar con nombres destacados como Carlos Narea, Joaquín Sabina y Miguel Ríos. Ahora, su faceta en el teatro se hace presente con la entrada a la obra Lagunilla Mi Barrio y por este motivo, pudimos platicar con él.

Eliu Rosas (ER): ¿Cómo ha sido el caminar en su carrera?

Edgar Oceransky (EO): Yo empecé a cantar profesionalmente en 1993, grabé mi primer disco en 2001 y a partir de ahí realicé otros 18 discos. He tenido la fortuna de participar con artistas a los que admiro profundamente desde siempre, gente que está aquí, gente que se ha ido como Pablo Milanés, Armando Manzanero, Pancho Céspedes, Alejandor Lerner, David Summers (Hombres G).

He podido visitar muchos países con mi música, voy a empezar una gira en Estados Unidos, vamos a Las Vegas, a San Antonio, Los Ángeles; he estado en España, Cuba, Puerto Rico, Dominicana, Guatemala, Colombia, Argentina, y me he dedicado a escribir canciones sobre todo para mi, autobiográficas pero he tenido la dicha de que otros artistas me han grabado, por ejemplo Kalimba que grabó «No me quiero enamorar».

Así ha sido mi trayectoria musical, he creado un festival para la música de los cantautores porque no había un festival grande para los cantautores como lo es El Trovafest, que lleva ya 8 ediciones desde 2014.

ER: Sobre las personas que han contribuido en su música ¿Qué se siente el que otros artistas interpreten su música?

EO: Es como una caricia al corazón, ver que alguien tomó una canción tuya y la hizo propia, porque esa ha sido esa constante en las personas que han grabado mis canciones, no solo lo han hecho porque les parezca una buena canción sino porque sienten o han vivido algo parecido. Me comentaba esto por ejemplo cuando la señora Lupita D’Alessio cuando cantó «Te Dejé» que había sido la historia que ella había vivido en algún momento de su vida; es muy bonito saber que podemos compartir con artistas a quienes admiro, hacerlos sentir que la canción está escrita para ellos, es algo muy bonito.

ER: Para usted, ¿Cuál es la huella que deja usted dentro la música?

EO: Es algo muy difícil de decir porque siento que sigo haciendo cosas, que sigo creciendo. Quienes dirán que huella dejé serán los que vienen después de mi, será el público, otros artistas. Para mi es muy complicado, citando a Antonio Machado «se hace camino al andar», no sabes muy bien hacía donde caminas pero vas forjando tus propios caminos, a veces cuando volteas atrás te das cuenta que hay un camino pero no sabes desde donde empieza.

Trato de vivir lo más posible en el presente, si logró dejar alguna huella a mi me gustaría que me recordaran como alguien que revalorizó la vida cotidiana, mi música habla de mi vida cotidiana, no habla sobre cosas extraordinarias, épicas, himnos, ni elegías, al contrario habla de mis hijas, de mi carrera, de mi casa, de los amores que han compartido la vida, de lo más sencillo.

Para mi eso es lo más importante, la vida cotidiana, eso es lo extraordinario: que tenemos vida. No importa ser épico para que tu vida sea trascendente, el hecho de tener vida ya es trascendente.

ER: ¿Qué es lo que ha sentido con lo que ha vivido durante estas tres décadas?

EO: Primero, una gran alegría por poderme dedicar a lo que más me gusta que es la música, no todo el mundo puede hacerlo. Segundo, descubrir cual es ese lugar que yo puedo ocupar en el mundo, más allá de que me guste hacer música a mi me gustaba la psicología y no terminé en la psicología por lo que me dí cuenta que mi lugar estaba en hacer música.

Las canciones que yo escribía no solo me tocaban a mi sino que tocaban a los demás, otra de las satisfacciones más bellas y que más plenitud me han regalado. El ver que si yo escribo algo desde el fondo de mi corazón y a mi, o me regaló una alegría o me regaló un aprendizaje o me sanó alguna herida, poder hacer lo mismo con otras personas. La música es sanadora, medicina, muchas canciones de otros autores me han sanado.

El agradecimiento por tener una vida tranquila, útil, una por la que además poder darle el sustento a mis hijas, puedo contribuir a su educación, puedo tener un mundo y una cultura que gracias a los viajes también puedo compartirles. Dejarles un legado así, contribuir de esta manera a mi gente cercana es de lo más bonito que me deja la música.

ER: ¿Qué es lo que inspira a Edgar como ser humano a seguir adelante? ¿Qué te motiva todos los días?

EO: Es una muy buena pregunta porque no todo el mundo encuentra la motivación para levantarse todos los días. Y creo en el momento en el que hice consciencia de lo milagrosa que es la vida, de tener claro que no sé si voy a tener una segunda oportunidad, no saber si hay vida después de esta, creer que esta es la oportunidad, por lo menos para este Edgar Oceransky se acaba todo con esta chance.

Por ello, lo que me motiva es seguir descubriendo que existe en el mundo algo que disfrute, mis hijas, verlas como se desarrollan, ver lo que la vida me regala todos los días desde un bonito amanecer hasta una buena charla con los amigos, un día de concierto hermoso en el que terminas con el corazón lleno. Siempre hay motivos para levantarse aunque a veces no es fácil, no te lo voy a negar, el cansancio o que anímicamente no te encuentres bien.

Recomiendo descansar, hay veces que no te quieres levantar, no lo hagas, date la oportunidad de mirar hacía dentro ese día, esa semana, si te hace falta apagar el switch, hacerlo. Pero que no se vuelva una costumbre, ya que esto se convierte en una depresión, a la vida hay que amarla todos los días.

ER: ¿Qué sigue en su faceta musical?

EO: Sigue el lanzamiento de mi nuevo disco. Hemos terminado el proceso de mezclarlo, estamos terminando la parte del video ya que grabamos en vivo, entramos a la parte de diseño, ya estoy decidiendo el título. Me tiene muy emocionado porque es un disco que tiene 10 canciones de las cuales 9 escribí con artistas que son mis amigos a quienes admiro que tuvieron la delicadeza de ponerse al servicio de una canción en conjunto, de escucharme cuando yo tenía una idea y escribirla conmigo, eso te habla de una humildad tremenda, que me compromete a hacer lo mismo.

Fue un ejercicio bellísimo durante 2 años con Yayo González de Paté de Fuá, Pedro Guerra, Andrés Suárez, Diego Ojeda, Bernardo Quezada, Ale Seguer, Miguel Inzunza, Kurt, Reily, Rodrigo Rojas. Hice un álbum que al hacerlo en el estudio con mi banda, tiene una cohesión que no había tenido de esta manera otros discos míos, agradezco tener un estudio tan grande, en el que tengo un piano, en el que cabemos toda la banda, en el que podemos estar horas y horas creando, sin pensar en el tiempo, cuanto te costará el estudio, cuanto pagaremos de hoteles (todos nos quedamos en la misma casa), desayunamos, comemos, conversamos juntos: es un proyecto que me tiene más feliz, es mi mejor trabajo, sacaremos sencillos en diciembre y espero comenzar gira en diciembre.

El 31 de agosto y 1 de septiembre estaré en el Centro Cultural Teatro 2 cantando en Lagunilla Mi Barrio, cantando para un proyecto que es parte de la cultura capitalina, de la CDMX y de México. Lagunilla Mi Barrio fue una película importantísima para la cultura nacional y la obra lo sigue siendo, los invitó a que me acompañen porque cantaré dos canciones mías en esta puesta en escena.