Santero y Los Muchachos deslumbro en el Club de Rock and Roll de la CDMX

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La banda valenciana Santero y Los Muchachos reúne a músicos de sólida trayectoria en un proyecto creado para dar vida a las composiciones de Miguel Ángel Escrivá. Tras su paso por La Pulquería, Escrivá buscó un nuevo rumbo y desarrolló un estilo único al que llaman «rock reposado», caracterizado por canciones que resuenan con intensidad y profundidad emocional. Junto con Joseman Escrivá y Soni Artal, han logrado consolidarse con cada nuevo lanzamiento. En su reciente visita a México, ofrecieron una presentación en la Ciudad de México que no dejó a nadie indiferente y que demostró, una vez más, el poder de su propuesta musical.

La banda se presentó en la capital en el Club de Rock and Roll,  dando al público una increíble presentación.

El concierto comenzó con buen ritmo; al son de «Ojos Pardos», el público empezó a emocionarse, y para darle un toque especial al show, estrenaron atuendo: trajes tipo vaquero color salmón y sombreros a juego. Estos trajes combinaron a la perfección con su presencia y desenvoltura en el escenario. Durante el concierto, incluso lanzaron uno de los sombreros al público.

Por supuesto, interpretaron la canción «Día de Muertos», precisamente para celebrar la época. En esa misma línea, y para recordar que el tiempo pasa y que hay que vivir el momento porque todos vamos a morir, tocaron su icónica canción «Dragón». Otras dos de las canciones más populares de su repertorio fueron «Ventura» y «El Perdedor».

Entre el Pasado y el Futuro: Santero y los Muchachos llegan con ganas de Conquistar el Escenario Mexicano | Revista Kuadro

Si en algún momento el público se sintió identificado, fue con «Amigo Infiel», una canción que encendió a todos para cantar al unísono.

Uno de los momentos más emotivos fue cuando, en conmemoración a los damnificados de Valencia, tocaron «Río Bravo». El vocalista compartió la experiencia emocional que vivió al componerla, inspirada en la noticia de una familia salvadoreña que, al intentar cruzar el río, vio cómo el padre y la hija de pocos años murieron ahogados ante la mirada desolada de la madre. En aquella época, su propia hija tenía aproximadamente la misma edad, y fue ese sentimiento el que lo motivó a escribir «Río Bravo».

Después de este momento de cercanía, tocaron dos canciones más y cerraron con broche de oro interpretando una canción pedida por el público. 

Y si no pudiste asistir no te preocupes, ya que este  9 de noviembre volverán a la Ciudad de México para presentarse en el Centro Histórico, en República de Uruguay 86, el concierto será benéfico a los damnificados DANA. 

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