Ritual Maldito (Reseña)
La vida es en sí misma algo muy misterioso, inmenso e incomprendido, para algunos constituye un milagro y para otros, no es mas que producto del azar, no obstante, si la delimitamos a la cotidiana y casi siempre rutinaria vida humana, parece ser que una consecuencia de la falta de comprensión de nuestro entorno, es la presencia de un sentimiento de incompletitud, que como una sombra nos acompaña y cual depredador nos asecha, especialmente en momentos de debilidad tristeza o pena. Sentirse incompleto es prácticamente un sinónimo de sentirse imperfecto, tal acto suele manifestarse mayormente en los pensamientos, animando su propia imaginación para crear todo tipo de escenarios en los cuales, el individuo, supone será feliz por tener una u otra cosa en su vida.
Es cierto también, que los seres humanos no somos tan distintos unos de otros, y casi por regla general, todos caemos en la seductora idea de imaginar como sería nuestra vida si tuviéramos aquello que deseamos. Fantasear no es un acto completamente malo, pues muchas son las ideas que nacen a partir de la visualización, pero a veces, pensar demasiado puede alejarnos de nuestra realidad, pues si nos enfocamos en lo que nos hace falta, dejamos de valorar lo que tenemos en nuestro tiempo presente, trayendo no solo falta de felicidad en el aquí y ahora, sino que además en el acto también suele nublarse el futuro.
Si los seres humanos tuviéramos mayor consciencia de que casi todo el tiempo estamos equivocados, tendríamos mayor prudencia con lo que deseamos, pues es fácil pensar que nuestros anhelos traerán bienestar a nuestra vida, sin embargo, no tenemos certeza de ello, es por esta misma razón, que pocas veces meditamos las consecuencias que traerían nuestros propios deseos. En su obra Ritual Maldito, los directores exploraron una idea similar, a través de la historia de un niño, que sin explicar muy bien cómo o porqué, se encuentra sin la capacidad de poder hablar, motivo por el cual se comunica con su padre mediante lenguaje de señas. Tras la muerte de su madre en circunstancias extrañas, él y su padre deciden mudarse. El pequeño como es natural, decide explorar la casa encontrando un extraño libro de magia que contenía toda clase de rituales para obtener cualquier cosa deseada.
Una serie de páginas misteriosas llenas de tratados y emblemas desconocidos inundaron la mente de aquel infante, quien rodeado de soledad decidió aventurarse a lo desconocido, encontrando rápidamente un ritual para obtener, según aquellas palabras, cualquier deseo. Velas, espejos y sangre serían algunos de los elementos requeridos para practicar aquel ritual maldito, no obstante, el elemento principal sería la invocación de una entidad fuera de este mundo, denominada antiguamente como un Genio, cuya naturaleza sobrenatural le confería la capacidad de materializar, cualquier petición, a cambio de un pago, del cual, dicho sea de paso, vendría acompañado de trágicas consecuencias.
Ritual maldito es una película, con una trama simple pero que, de algún modo, logra captar fácilmente la atención del espectador, destaca además los pocos elementos con los que está formada la historia, especialmente en lo que a actores se refiere, pues hablamos esencialmente de tres personajes, mismos que logran mantener un suspenso y tensión constante, propiciando la retención de la atención y por supuesto, muchos sustos y algunos gritos. La trama, aunque algo predecible, logra tener ciertos matices de autenticidad, que la convierten en una excelente opción para pasar el rato.
Escrita y dirigida por los cineastas David Charbonier y Justin Powell, reconocidos por obras como “El niño detrás de la puerta” (2020) y “Push” (2024), el largometraje fue lanzado en el año 2021, aunque en México, su estreno tuvo lugar en 2024, cuenta con la participación de los actores Ezra Dewey, Tevy Poe, Rob Brownstein, entre otros más, algunos de los cuales han trabajado previamente las obras antes descritas.
