«Welcome Al Norte»: Una comedia mexicana que toma camino correcto a la diversión.
Gustavo Loza es un director que le sabe al negocio del entretenimiento, sus trabajos siempre son garantía de carcajadas y de que la gente que se siente a ver una de sus cintas en el cine o ya sea alguna de sus series de televisión la va a pasar muy amenamente, y con su nueva película “Welcome al norte” aplica la misma fórmula para divertir en sus casi dos horas de duración.
“Welcome al norte” es una cinta sin pretensiones algunas más que el de hacer que el público apague el cerebro un rato y se deje llevar por las desventuras de un Silverio Palacios entregadísimo (como siempre) a su papel como Polito, un hombre que por una mala jugada laboral, su deseo de residir y trabajar en Cancún se ve truncado cuando su jefe decide mandarlo al otro extremo del país siendo que él reside en Mérida: Tijuana.
Las contraculturas no podrían dar más risa y las situaciones se salen de control cuando Polito conoce a su nuevo equipo de trabajo y este se deja llevar por lo que ellos llaman “la buena vida”.
El trabajo del elenco es maravilloso ya que aunque la idea de encariñarse con ellos resulte extraña, no puedes caer más enamorado de “El spooky” y compañía. Ricardo Abarca vuelve a hacer mancuerna con Loza después del éxito de “¿Y qué culpa tiene el niño?” demostrando que la comedia es algo que se le da natural. Oro dato es que Ricardo no envejece jamás y lo verás igual que en aquella famosa cinta, quizás igual que en sus inicios, ¡Que pase el secreto!.
Amorita Rasgado interpretando a la esposa de Polito logra un papel creíble y además tierno como la mujer que ante todos los problemas generados por la trama, se mantiene al pie del cañón a lado de su esposo hasta que todo explota y bueno… eso lo tienen que ver.
Si bien aquí nunca hemos sido partidarios de los estereotipos y las etiquetas, el único punto negativo que podríamos mencionar aquí es lo casi caricaturesco que pueden llegar a ser ciertos personajes, como la mamá de “Spooky” por ejemplo (una estupenda pero exagerada Raquel Garza), que es casi una chola de Chalco representada en pantalla cuando las verdaderas madres de familia que actualmente viven en la frontera son lo más alejado a lo que se ve en pantalla.
Es evidente como con los años el cine en México ha venido cambiando y explorando nuevos territorios que anteriormente, por ejemplo hace 20 años, no tocaba. Hablando más claramente recordemos el cine que se hacía nacionalmente a inicios de los años dosmil cuando todo era una denuncia como Nicotina, Amores Perros o Perfume de Violetas, hasta pasar por esa época rara en la que no había cinta en la que Omar Chaparro y Martha Higareda no aparecían es agradable saber que aunque sea cine de comedia, en cada ocasión se buscan hacer otro tipo de comedias y hasta se está logrando adaptar cintas de otras partes del mundo no tan conocidas en el país para darnos historias de éxito ya probado con anterioridad.
“Welcome al norte” no es la comedia del año ni será quizás recordada para la posteridad pero es una cinta que tiene mucho corazón y contra todo pronóstico un mensaje positivo al final de cuentas, que en estos tiempos se agradece muchísimo.
Esta película se encuentra ya en todos los cines del país, así que pídele permiso a quien tenga que dártelo y prepárate para acompañar a Polito en el viaje de su vida.
