Por Omar Iturbide 

«Monkey Man: El despertar de la Bestia» es la nueva película dirigida y protagonizada por Dev Patel. Este thriller de acción, que marca el debut de Patel como director, sigue a un hombre enmascarado en su búsqueda de venganza, evocando la figura del dios indio Hanuman. La película, a través de sus brutales peleas y su vertiginoso ritmo, se posiciona como un contundente debut en la dirección.

La transición de Dev Patel de actor a director es notable y audaz. En su primer largometraje como director, demuestra una sorprendente habilidad para orquestar escenas de acción intensas y bien coreografiadas. Su experiencia como actor se traduce en una dirección que prioriza la emoción y la intensidad, logrando que las secuencias de combate no solo sean visualmente impresionantes, sino también emocionalmente resonantes. La influencia de su carrera actoral se percibe en la profundidad que otorga a los personajes, incluso en un género tan orientado a la acción.

De los aspectos que más resalta es el uso distintivo de los colores, especialmente el rojo, que predomina a lo largo del film. Este color, tradicionalmente asociado con la venganza, la ira y la pasión, subraya la naturaleza visceral de la narrativa. La paleta de colores no solo añade una capa visualmente atractiva, sino que también refuerza los temas centrales de la historia, creando una atmósfera intensa y envolvente.

Aunque la película recurre a ciertos clichés del género de acción, como los flashbacks excesivos y algunas tramas predecibles, también se diferencia de sus pares en varios aspectos. En lugar de depender únicamente de la acción por la acción misma, el filme integra elementos de denuncia social y folclore, proporcionando un trasfondo más rico y significativo a la historia.

Este enfoque no solo enriquece la trama, sino que también ofrece un comentario crítico sobre temas contemporáneos, elevando la película por encima del entretenimiento superficial.

Además, la violencia extrema y la crudeza de las secuencias de acción son tratadas con un estilo visual distintivo, que se siente tanto como un homenaje al cine de puñetazos tradicional como una expresión personal de Patel. A pesar de algunos problemas de ritmo y claridad en la trama, la película logra mantener la atención del espectador con su intensidad y un estilo que diferencia del resto.

«Monkey Man» muestra el potencial de Dev Patel como director. Con una narrativa de venganza visceral y estilizada, el film satisface a los amantes de la acción con sus secuencias de combate bien ejecutadas y su protagonista profundamente desarrollado. Aunque algunos elementos pueden resultar predecibles o excesivamente explicativos, la película se diferencia por su mezcla de denuncia social, folclore y brutalidad. Se estará estrenando en cines a partir del 16 de mayo.

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