El Nuevo Tenorio Cómico, teatro con humor pandémico y sorpresas
El Nuevo Tenorio Cómico ha regresado al Centro Cultural Teatro 1. Con unos ligeros ajustes a su elenco regular, la obra de Alejandro Gou, recibió a Unplugged News y otros medios en una función especial de prensa, donde personajes -y actores fuera de los mismos-, no dejaban de recordarnos que la obra le salió gratis a todos los presentes.
Desde que el CCT1 reabrió en Octubre del año pasado, la administración del recinto ha sido sumamente cautelosa con los protocolos sanitarios. Al subir las escaleras eléctricas, puedes llevarte un susto por la enorme nube blanca que te encuentras al llegar, pero esto es por la utilización de nebulizadores continuos que se usan para procurar una constante sanitización, la cual se asegura con el ya clásico gel antibacterial y una pistola sanitizante usada por los acomodadores.
Con la misma nube sanitizadora dentro del teatro y una sana distancia de dos asientos libres por cada dos ocupados, se dió la tercera llamada y se levantó el telón. Germán Ortega, Freddie Ortega y Claudio Herrera, en sus personajes de Igor, Dr. Frank y el Policía Cuico, dieron pauta a la primera escena del tenorio al recrear su ya conocida rutina, característica de sus Relatos Macabrones, donde el Dr. Frank trata de explicar la historia de Don Juan Tenorio a Cuico y es constantemente interrumpido por los inentendibles dobles sentidos de Igor.
Esto da la pauta a la entrada de Don Juan Tenorio, interpretado una vez más por Arath de la Torre quien, acompañado de un séquito de bailarinas, hace su gran entrada y da tiempo a que los Mascabrothers cambien de vestuario y lleguen ahora como el Jarocho y el Hotelero. Estos últimos no pierden oportunidad en hacer referencia a la controversia en la que se vio involucrado el protagonista recientemente al participar en un comercial donde se discrimina a los voladores de Papantla.
Al más puro e intencionado estilo de Alfredo Adame, don Juan nos recuerda que ni a él ni a su intérprete les afectaron las críticas hechas por la prensa. Después de un intercambio de chiste y pequeño roast, Germán Ortega salió de escena y volvió como guerrero azteca para que, después de una danza tradicional, con su caracola mágica entonara la melodía de Ventaneando para invocar a don Luis, interpretado por Daniel Bisogno.
“He llegado de prisa a ponerle una madriza a todos los de Televisa” expresa jocosamente el personaje para posteriormente irse de jab a jab defendiendo a sus respectivas televisoras. A pesar de los constantes desacuerdos entre ambas partes, pudieron estar de acuerdo en que no quieren promocionar sartenes a los que no se les pega nada, como a Raúl Araiza, y que era mejor estar en Televisa o TV Azteca que ser YosStop en este momento.
Cristian Ahumada regresa para dar vida al personaje que lo hizo famoso, el presidente Andres Manuel López Obrador, que viene acompañado de su fiel patiño, Marcelo Ebrard, interpretado por Pierre Angelo, quien ha cobrado nueva relevancia por su serie Tic Tac Toc: El Reencuentro. Los políticos recibieron sendos abucheos de parte del público, en especial cuando El Peje mencionó que la mañanera no era suficiente, también tenía que invadir el Tenorio.
Sorprendentemente, Carlos Loret Me Enmola (Arath de la Torre) y Brozo, encarnado por Julio Alegría, vinieron a salvar el día y al ritmo de Luis Miguel se enfrascaron en una batalla de baile y canto en contra del Peje y Ebrard quienes sacan sus mejores pasos con La Ratonera de fondo. Sin embargo, esto no fue suficiente para acallar el enojo del público por la actual administración y de la que Ahumada y Pierre fueron víctimas. Es imperativo aplaudir la interpretación de Alegría como Brozo pues solo el día anterior se le notificó que estaría encarnando al polémico payaso.
Terminado el primer acto, el teatro se vació para llamar a la audiencia de vuelta a la butacas en la tercera llamada con Like a Prayer de Madonna para recibir a todos de golpe. Las bailarinas regresan para dar la bienvenida a un nuevo personaje. La sedosa cabellera de quien entra logra confundir a más de uno, pero todas las dudas se ven esclarecidas al revelarse a Albertano como el padre Brígido, quien es el confesor de cabecera de doña Inés, personaje que cada temporada del Tenorio genera intriga sobre la actriz que dará piel a la misma.
Maribel Guardia entró a escena. levantando los chiflidos del CCT1 al ser relevada como doña Inés. El inundante sonido es callado por Albertano, quien prefiere atender las dudas de amor que tiene doña Inés. Al escuchar las intenciones y deseos de Inés por entregarse a don Juan Tenorio, el padre Brígido decide revelar su amor por ella y la cuestionó sobre su decisión, para luego pedirle desesperadamente que lo escoja a él, después de entregar los hábitos.
Inés rechaza el coqueteo del padre, pero este último al menos se encuentra agradecido con su amabilidad distante de las versiones anteriores del personaje, más específico las de Niurka y Ninel Conde. “El amor es como un elote. A veces, nos toca tierno; a veces, nos toca duro.”, decía Brígido, resignado.
La anticipada llegada de don Juan Tenorio supuso que la iglesia cambiara de giro después de que doña Inés aceptara pasar unas horas de manera íntima con don Juan. Don Brígido trató de pagar con tarjeta por los servicios del ahora motel, pero la misma fue rechazada. Interrumpidos por la Güera Limantour, la Jitomata y la Perejila, Inés y Juan nos recordaron la importancia de lavarse las manos con la canción de Mojar y Enjabonar. Aunque con dificultades técnicas.
El uso de las vacunas es algo que también fue sumamente referenciado en el Tenorio. La Güera Limantour decidió renombrar las secciones del teatro por la vacuna que los representa: las primeras 10 filas serían Pfizer, pues fueron a Estados Unidos a ponérsela; las siguientes 10 sería la gente de la Del Valle quienes recibieron la SputnikV; finalmente, las últimas filas serían los Cancino, por razones obvias, según Limantour.
La falta de fondos llevó a nuestros protagonistas a la casa de don Juan. Ahí mismo, el padre Brígido arriba y decide volver a ofrecer su amor a doña Inés quien lo vuelve a rechazar. Albertano demuestra su alta valía en esta puesta a cantar una canción del Buki tras argumentar que si canta una de Joan Sebastian, Maribel Guardia le cobraría regalías.
Juan Tenorio entra a escena para encarar a Brígido. Después de discutir la posibilidad de una menage a trois, Margara Francisca sale de entre el público y comienza a despotricar contra la obra y remarca que si se mantiene a De la Torre en el papel, sufrirá el mismo destino que el reboot de Candido Pérez y rescató la posibilidad de convertirse gracias a Maribel Guardia.
El icónico personaje de Lalo España dio pie a que todos los personajes volvieran para su última aparición. El primero fue El Peje que en su afán de defender el país, termina huyendo para no sufrir el mortal destino que Margara, Ebrard, don Luis, Brígido y Frankie vivirían a manos de don Juan Tenorio. Para el final, se revela que doña Inés ha cambiado de opinión y que quiere continuar su vida de lado de Igor lo que desencadena en un enfrentamiento que deja a doña Inés sola, con todos sus amores muertos.
Pudimos platicar con Pierre Angelo después de la función, quien expresó su gusto por interpretar a Marcelo Ebrard, puesto que considera que el canciller siempre está en el ojo del huracán y es divertido para él poder traer esas emociones al escenario. Angelo invita al público que ya vio El Tenorio Cómico que regresen a verlo porque de lo que trata mucho esta obra es sobre burlarse y criticar los temas de actualidad.
Ante los aplausos del público, el Nuevo Tenorio Cómico nos presentó lo que la gente podrá vivir a lado de estos entrañables e irreverentes personajes, en las próximas cinco semanas, en el Centro Cultural Teatro 1. Después de esto, saldrán de gira por el país, con Guadalajara como su primer destino.