Dos sillones, una mesa al centro, un taburete y un par de libreros te invitan a sentarse y reflexionar a través de la  presencia de un caso tan particular, pero conocido para cualquiera que pueda atender la puesta en escena que se presenta en la planta más alta del Teatro MIlán y el foro Lucerna. 

La adaptación a la obra de Conor Mcpherson, llevada a cabo por Pablo Perroni y Miguel Septién, lleva a un viaje de cinco actos (dos horas) por un camino sinuoso, tormentoso e imprescindible como lo es la psique humana. 

¿Qué estoy haciendo? ¿Para dónde se dirige mi vida? ¿Estoy envejeciendo o soy demasiado joven aún? ¿Cómo sería mi vida de haber tomado aquella decisión? ¿Soy feliz? ¿Realmente sé lo que es ser feliz? ¿Me gusta lo que hago o es mi confort hablando? estos y otros pensamientos pueden llegar a abordar la mente de la audiencia durante una obra cruda que nos muestra a nuestros protagonistas avanzar, cada uno a su manera, a la siguiente etapa de sus vidas respectivamente.

Un viudo, con el objetivo claro de superar la reciente muerte de su esposa, comenzará una serie de sesiones con su psicólogo, el cual,a la par de la terapia sufre cambios en su vida que lo llevan de un extremo a otro de su mente. Cuestionando todo lo que él ha considerado como real y correcto a lo largo de su vida. 

Ambos compartirán a través de los actos de esta obra sus desgarradores descubrimientos personales derivados del autoconocimiento y autodescubrimiento de la verdad de sus actos, sus acciones y sus sentimientos. Autoengaño, honestidad, amor propio y autoestima marcan el camino de sanación a años de culpa y sentimientos reprimidos.

Las interpretaciones no tienen desperdicio alguno, aunque la interacción de los personajes no es tanta como se esperaría. Al abordar los actos a manera de sesión terapéutica, los monólogos toman la relevancia y preponderan en la manera de trazar el arco y crecimiento narrativo de cada uno de los personajes. Las intervenciones de Alberto Lomnitz y la poderosa presencia de Gloria Toba, en el segundo acto, dan un toque especial y lleno de misterio al montaje escénico.

Decir o dar más detalle del argumento general del libreto y la puesta en escena, arruinará la experiencia y el ambiente de misterio y suspenso que logra generar el equipo de producción liderado por Septién. No obstante, la apreciación testimonial de los desenlaces y caminos de los protagonistas,hacen reflexionar y filosofar al respecto de una problemática que el ser humano tiene desde el principio de los tiempos, saber quién es y entenderlo antes de que sea demasiado tarde. 

¿Quiénes somos? ¿Hemos decidido forjar por nuestra propia elección quiénes somos, lo que hacemos, nuestros gustos y sueños? o solo somos el cúmulo de lo que nuestros padres, familiares, maestros, el machismo, el capitalismo, la heteronorma social y la sociedad en general, ¿ha definido nuestras personalidades o somos lo que hemos decidido ser? todas estás preguntas se van gestando en el colectivo que presencia la gran adaptación la cual invita a la introspección de un diálogo interno entre los deseos más anhelados, las obligaciones, los miedos y culpas que nos rodean.

Podrás encontrar esta maravillosa puesta en escena los Viernes, Sábados y Domingos en horarios estelares 7:45, 6.00 y 8:00 pm (Consulta cartelera) durante los meses de agosto y septiembre en el inmueble de la calle Lucerna en la alcaldía Cuauhtémoc.  

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