Sing 2: ¡Ven y canta de nuevo! Una secuela digna de bailar y cantar

¡Justo cuando crees que las secuelas realmente no son buenas, llega #Sing2 para callarnos la boca, o, mejor dicho, para hacernos cantar!

A finales del ya lejano 2016, Universal a través de su casa productora de animación ILLUMINATION STUDIOS lanzó en cines “Sing”, una exitosa película animada y familiar que nos enseñaba que perseguir tus sueños a toda costa te guiará siempre a un final feliz y más si hay música de por medio. En aquella ocasión todo el concepto se percibía como algo pequeño pero sustancioso. El resultado, un filme que cumplió más de lo esperado en la taquilla mundial y una secuela que rápidamente y sin ser sorpresa fue confirmada.

Sing 2 inicia tiempo después de donde terminamos la primera película, en el escenario del renovado teatro Moon con nuestros personajes favoritos dándolo todo en su temporada teatral de “Alicia en el país de las maravillas”. Se agradece que desde el primer instante nos adentran en la trama, un evolucionado Buster Moon (o el koala mas tierno del mundo del cine podríamos llamarle también) preocupado por llevar su espectáculo y a sus artistas a otro nivel son el parteaguas de todo.

Es increíble como una cinta animada puede lograr que sus personajes te transmitan todo tipo de emociones como la tristeza, la decepción y la frustración; aquí hablamos de lo bien cimentados y perfectamente delineados que están los personajes. Es importante recalcar esto porque justo en el primer acto, somos participes de como las ilusiones de más de uno de los protagonistas se rompen al enfrentarse a uno de los “NO” mas duros de sus carreras.

En Sing 2, Buster Moon y compañía tienen problemas en otro nivel, quizás los temas que se tocan son menos escandalosos que en la original, por ejemplo, ya no vemos a un Johnny enfrentarse al dilema ético de ser parte de una familia de rufianes, sino que ahora lo vemos en dificultades de encontrar el ritmo correcto para lograr darlo todo en el escenario, ahora observamos a Rosita con fobia a las alturas cuando en la primera película conocimos a una cerdita tímida con problemas de confianza. Cambios arriesgados pero que no se sienten mal logrados, ya que la historia se siente fresca en muchos aspectos y estos detalles no restan a la misma.

Un aspecto que no solo iguala, sino que supera a la original, es el soundtrack. La lista de canciones utilizadas para que la compañía Moon interprete en esta ocasión es ¡GRANDIOSA!, y no es que la primera demerite, pero ahora se incorporan ritmos y canciones de todo tipo, canciones que acompañan perfectamente cada una de las escenas que vemos en pantalla, y que describe lo que en ese momento están sintiendo los personajes. Clásicos del pop y rock así como temas modernos nos acompañaran por las casi dos horas de duración de la película. La combinación es perfecta.

Los rostros que se suman en esta segunda entrega (en su mayoría villanos) también son adorables, que, si bien su desarrollo o intenciones no son muy claras o no están tan delineadas, los disfrutas mucho. Por ejemplo, la hija del señor Crystal es casi en automático su cambio de personalidad al final de la película, así como el cambio (dentro de un momento crucial de la trama) de Clay Calloway no tiene una razón de ser. (Cof cof, no daremos spoilers).

Aunque en esta ocasión no tenemos canciones dobladas al español (claro que extrañamos escuchar algo tan espectacular como “Sueltas al fin” en la voz de alguna de las Ha Ash), el trabajo del talento mexicano que da voz a nuestros personajes para todo América latina es excelente en casi todos los casos. Realmente con sus diálogos nos transmiten esa vibra tan especial que se requiere para convertir a estas animaciones en algo entrañable. Un trabajo también muy bien logrado de Benny Ibarra, Roger Gonzalez, Vadhir Derbéz y un comiquísimo Rubén Cerda.

El mensaje de que nunca es demasiado tarde para ir por tus sueños está presente, así como otras pequeñas cápsulas de superación disfrazadas de escenas a veces cómicas y otras veces de drama que tienen como fin común enseñarnos, que por más oscuro que sea el momento por el cual estes pasando, o por más difícil que se vea el camino, en palabras del propio Buster Moon “lo mejor de estar en el fondo es que lo único que puedes hacer es subir”.

Con un espectacular, pero realmente ¡ESPECTACULAR! acto final, Sing 2 es una película imperdible en esta temporada de estar con los que más amas. Seguramente al finalizar la función querrás como nosotros saltar de tu asiento para cantar y bailar, pero sobre todo para ser feliz. Sing 2 es una celebración a todo lo bueno de la vida: el amor, la amistad y la música. Realmente es magia para chicos y grandes.