Diana Bovio: aprendiendo a ser ‘canalla’
Ha sido un camino arduo para la actriz Diana Bovio que, desde la creación de Los Primos hasta su rol protagónico en 1976: La Posesión de Altair, siempre ha buscado cautivar a la audiencia por medio de cualquiera de sus proyectos. Sin embargo, la comedia es algo que siempre la ha atraído. Por ello, no es de extrañar que sea una de las protagonistas del más reciente filme de Gustavo Moheno, Lecciones para Canallas. En Unplugged News tuvimos la oportunidad de charlar con ella desde la gala presentada en el pasado Festival Internacional de Cine de Guadalajara acerca de este filme donde interpreta a Marisela, una cínica estafadora que es tan inteligente como sensual.
Entre ‘Canallas’: Trabajando la estafa
Bovio comenzó hablando de cómo llegó a este relato y cómo fue el trabajar con Gustavo Moheno para esta película. «A mi me emociona mucho trabajar con gente nueva, me emociona aprender. Inicialmente me dieron las escenas de Jenny, el rol de Danae, y dije ‘qué raro, ella está muy chiquita ¿porqué me dan estas escenas para la audición?’. Las preparé, llegué al casting y fue cuando me dice Gustavo que iba para Marisela. Entonces me pasaron las escenas de ella y fue como algo bien improvisado, de entender en 5 minutos la esencia del personaje y de demostrarle (a Gustavo) que lo entendía, que era capaz de encarnarla. A partir de ahí, fue un reto, conectar con ese cinismo, con esa oscuridad que tiene el personaje, esa malicia un tanto encantadora. Me daba mucha risa que la gente odiara al personaje y creo que el reto siempre fue ese, hacer un personaje tan canalla, encantador y memorable«, explicó la actriz.
Otra de las cosas que fue una gran experiencia para Diana fue trabajar al lado del gran actor Joaquín Cosío. «Es inmenso y genial, aunque físicamente también su presencia es súper intimidan te, él tiene mucha energía y una gran fuerza escénica. Fue un reto estar a su nivel y estar tranquila. Tenía mucho nervio de estar a su lado, me ponía muy nerviosa y la verdad es que me recibió con mucha generosidad, con tranquilidad, como quitándole peso a lo que íbamos a hacer. Simplemente me enseñó a disfrutarlo y vivir las escenas y estar presentes. Aprendí mucho a su lado, creo que Joaquín es de esos actores con los que entras al personaje y entras a la verdad y al momento, de verdad que es padrísimo trabajar con alguien que te da tanto», afirmó.
El oficio de la estafa: los retos de ser Melisa
Identificada más por el género cómico, para Bovio fue un reto hacer un personaje mucho más cínico, que acepta ese lado abusivo de su rol y no duda en utilizarlo a conveniencia. «Creo que todos los seres humanos tenemos un lado oscuro. A veces lo conocemos, a veces no y creo que entre más no lo conozcamos, más sale. Este personaje, a pesar de que todos los que he hecho tienen una faceta así, está consciente de esa oscuridad y la usa a su favor, donde dice ‘ya viví todo lo que viví y ya sé cómo puedo transformar este dolor o este vacío en recompensas’. Es un personaje que lo hace más complejo y más libre incluso. Es una mujer muy sensual que usa su cuerpo para obtener lo que quiere. En sí, al darle vida me cuestionaba todo el tiempo si estaba enamorada de Barry el Sucio, el personaje de Joaquín, o si también a él lo está utilizando o si es una muestra de amor y manipulación, creo que sí fue siempre un reto y creo que se logró hacer algo distinto de lo que había hecho», expresó.
Para crear una estafa en cine, una parte fundamental es el creerle a los protagonistas sus cuestionables intenciones, pues así las sorpresas y los giros funcionan de mejor forma. Para la talentosa actriz, es el elemento de autenticidad y veracidad el que juega una parte fundamental en ello. «Creo que conectar con la verdad es lo más importante, generar esa conexión de por qué lo hace el personaje y de dónde vienen esas ganas de hacer lo necesario para conseguir lo que quieres y siempre de una manera en la que tú puedas salir bien librado. Como dicen en la película: ‘Nuestros clientes, nos entregan el dinero en la mano, nosotros no estamos amenazando a nadie con ningún arma’. Lo interesante es entender su origen y por qué hacen esto y qué vacíos están tratando de llenar con el dinero que obtienen de su oficio«, declaró.
Y aunque la cinta maneja mucho más los aires de películas clásicas de estafas como El Golpe (George Roy Hill, 1973) o el remake de Ocean’s Eleven (Soderbergh, 2001), Bovio no es tan clavada en el género. Sin embargo, recordó una de sus cintas favoritas del mismo. «Aunque no me clave tanto en ello , honestamente, para preparar mi personaje, me acuerdo mucho de Snatch: Cerdos y Diamantes de Guy Ritchie. Me encantó su lenguaje, su crudeza, es una cinta super ruda, colorida, de mis favoritas«, confesó.
De terror, risas y estafas: el crecimiento de Diana Bovio
Algo que hay que reconocer es que Diana Bovio ha crecido y sigue forjando una carrera interesante que poco a poco hace más ruido, siendo una de las más destacadas de su generación. «Me pongo chinita de pensar cómo ha pasado el tiempo. De pronto volteo para atrás y digo órale, ya son 11 años de vivir en la Ciudad de México y de perseguir este sueño y de pronto decir que ya soy actriz, que ya me conoce un poco más la gente, que me he ganado un lugarcito en la industria, es increíble. Conozco mucha gente, he trabajado con tantas personas y estoy agradecida de lo que me ha hecho crecer mi trabajo. Siempre he estado muy segura que esto es lo que amo y es lo que quiero hacer toda la vida y justo estos últimos años fueron de un trabajo extenso, cansado, difícil y arduo, pero a su vez emocionante y divertido. Me han hecho poner todo en una balanza y entender que también la vida hay que vivirla, que no todo es el trabajo. También tienes que visitar a tus papás, salir con tus amigos y desvelarte y pasarla increíble los fines de semana, pero estoy agradecida de las oportunidades que se me han dado, de poder protagonizar series y películas, algunas de las que pronto van a saber de ellas. Me emociona ver el calor de la gente y la sala llena y sentir esa sensación que nos transmitimos mutuamente«, aseveró emocionada la actriz.
Asimismo, la carismática Diana nos compartió un poco de lo que viene en cuanto a proyectos se refiere. «Tengo por ahí unas series y películas que están un poco detenidas por la pandemia, como que todo se recorrió en fechas. De la que puedo hablar es La Novia de América que es del director Alfonso Albacete, una producción México- España, con Eduardo Casanova, un director español y actor increíble. Fue un proceso increíble conocerlo junto a Pol Monen y Pepa Charro. También están en ella Michelle Rodríguez, el queridísimo Christian Vázquez, Armando Espitia, otro gran amigo y muchos más. En ella interpreto un personaje muy colorido, muy sensual, super coqueta y sobre todo, muy mexicana«, adelantó.
Finalmente, la talentosa actriz nos regaló su definición de lo que es un canalla. «Para mí, significa el hecho de estar consciente de que estás violentando la libertad de otro ser humano y no demostrar remordimiento», concluyó.
Lecciones para Canallas estrena a nivel nacional el próximo 1 de septiembre y formará parte del ciclo de La Fiesta del Cine.