Una Cigüeña En Apuros: La Joya Perdida (reseña)
Vivir en grupos suele ser la forma vital de existencia de muchos seres vivos; en nuestro caso en su mayoría tendemos a establecer una familia con la que compartimos gran parte de nuestro existir. Existen casos más claros como lo son los lobos, los atunes o varias aves que suelen andar en grupos grandes; llámense manadas, bancos de peces o parvadas, al final es la misma lógica. Quizás en estas especies, y otras, el no optar por esta forma de vida ponga en riesgo la subsistencia.
En 2017, mediante la cinta animada «Una «Cigüeña» En Apuros» (título original Richard The Stork) se presentaría la historia de un gorrión que tras ser huérfano desde muy pequeño termina siendo adoptado por una familia de cigüeñas. Por ser biológicamente diferente, no logrará encajar del todo con su nueva familia y es durante una migración, de la cual no fue considerado ni notificado, que emprenderá un viaje a África para reencontrarse con su familia adoptiva de cigüeñas. Travesía que aportará muchos rasgos al personaje. Donde finalmente, Richard es aceptado por todos en la parvada de cigüeñas.
El hecho tácito de formar parte de un grupo sería una cuestión vacía si no se compone de un elemento fundamental: el sentido de pertenencia. Por ejemplo, que no todos los individuos del grupo tengan los mismos derechos podría romper este principio.
Seis años después llega «Una Cigüeña En Apuros: La Joya Perdida» (título original Richard The Stork 2), del director Benjamin Quabeck, donde se muestra que pese a haber superado la prueba que terminó por incluirlo en la parvada. Las cosas no pintan del todo como Richard hubiera deseado.
Por un descontento con las cigüeñas, Richard abandonará a la parvada; tras considerar que ya no es necesario ahí. Este suceso, tan repentino, hará que involuntariamente Richard emprenda un viaje; en el que conocerá a otras aves, entre ellas gorriones, de las cuales su suerte pende de una Gran Joya y los secretos que esta misma guarda.
Es interesante el punto de partida de la cinta de estar en un grupo pero no ser del todo tomado en cuenta. Aunque creo que es un retroceso porque de cierta forma es un poco refritear el argumento de la primera cinta. Es como si todo el viaje de Richard no hubiera servido para nada. Y que las cigüeñas lo siguen un poco menospreciando. Lo que sí es interesante es que ahora se muestra a Richard como alguien un poco prepotente y que se cree mejor a los demás. Lo único que creo que es un poco desalentador es que no se ve gran cambio en torno a este aspecto por parte del protagonista. Al igual que otras cosas que no tienen mucho sentido y que involucran personajes que se les percibía con mejor consistencia.
Un elemento que posee esta secuela, es la presencia firme de un antagonista (un pavor real y secuaces del mismo). Aunque creo que no es aprovechado de la mejor forma y a diferencia de la cinta de antes los malos, en un sentido implícito, son las cigüeñas, aquí no se ve un gran aprendizaje por parte del protagonista. Y también se puede notar que se intentó hacer esta película mucho más musical lo cual es positivo, pero no termina por nivelar las carencias nuevas con respecto a su predecesora.
Creo que sí nos ponemos a analizar el mensaje de la película, choca con el de su precuela. Pues una abduce consigo que lo importante es que nos propongamos y luchemos por ello; pues Richard si bien no es una cigüeña y sufre rechazo por algunos de ellos, hace todo lo posible para demostrar que es digno de pertenecer al grupo que lo ha acogido (de cierta forma, una apología al libre albedrío). Sin embargo, en esta nueva cinta toda la trama gira entorno a una cuestión más mística y dictada por profecías (el destino) que se íntimamente ligado con la gran joya que esta presente en casi toda la película. Eso sin mencionar que las motivaciones iniciales de Richard, de su viaje, se muestran más como un berrinche (a diferencia de la primera cinta que se ve como superación y alguien que busca mostrar que están equivocados sus detractores).
Tras ver ambas cintas, no solo uno puede notar diferencias entre los tipos de mensajes que se buscan dejar. Sino que también se notan un poco diferentes las estéticas de los personajes como sus personalidades (como el protagonista que es un poco menos bondadoso ahora). Algo que resulta un poco plano es que la película que desarrolla exclusivamente en un desierto, aspecto que se entiendo por como termina la primera película. Pero que irremediablemente termina por darle un tono muy apagado. Ya que anteriormente explorar distintos lugares, países, escenarios y aquí ya se percibe más limitado. Por lo que en un balance general, se percibe como un revés: pues la película parece tener más desaciertos que aciertos.